El síndrome de burn out, agotamiento o aniquilamiento en el profesional de la medicina, es una sensación de fracaso y/o de que los recursos personales o la fuerza se encuentran agotados o gastados, ésto termina afectando a la institución, al enfermo y sobre todo la salud mental del profesional de la salud. La mayoría de los estudios al respecto, señalan que 1 de cada 2 profesionales de la medicina presenta algún síntoma asociado.
Para conocer el origen de éste síndrome recomiendo hacer una revisión por todas las experiencias vividas desde la facultad de medicina hasta la etapa en la que se encuentre el día de hoy, ¿con qué expectativas llegaba aquel joven?, ¿qué expectativas le ofrecieron?, ¿cuáles se creyó?, ¿qué expectativas depositó el médico/a sobre sí mismo/a y qué expectativas depositaron los demás en él/ella?, y es que, no hay manera de que esto no esté vinculado, pues el síndrome de burn out, es una vaciamiento de sí mismo/a, provocado por el agotamiento de los recursos físicos y mentales tras el esfuerzo excesivo por alcanzar una determinada expectativa no realista que ha sido impuesta por el individuo, por los otros, por la institución , por la familia, por la sociedad.Las características del síndrome son tres principalmente:
¿Qué lo desencadena? Expectativas, exigencias, resistencia, negación y evasión a situaciones específicas, falta de comunicación efectiva con otras personas de la propia vida, reclamo de atención constante, estrés sostenido, inequidad en el trabajo que se realiza y la remuneración que se recibe, agresiones y descrédito originados en ambientes escolares, laborales y comerciales, dolores no afrontados, duelos reprimidos frente a la enfermedad y la muerte, la corrupción, la degradación del status del médico, autoexigencia por la falta de responsabilidad del propio paciente, el qué dirán, etc. No se deberá olvidar que la competencia establecida, promovida y reforzada desde la facultad de medicina y en cada una de las etapas en las que los profesionales de la medicina se desarrollan, ayuda a que lo anterior, lejos de ser enfrentado se rechace o se evite nombrar a toda costa.
¿Cómo se previene?
Aceptación abierta y debate creativo al respecto, cambios personales, cambios educativos, cambios en la cultura médica, afrontar la responsabilidad, aprender a programar, favorecer la autonomía, apego a la vida familiar, cultivar la relación con los colegas, mantener límites apropiados entre el trabajo y otras actividades, hacerse un espacio dentro de sus vidas, disciplina establecida, rutina de descompresión, educación en manejo de estrés, identificación de estrés y la exposición a incidentes críticos, manejo del tiempo, meditación y oración, reducir aislamiento social, mejorar la cultura y el entretenimiento, reducir la estigmatización de la profesión médica, definir niveles de responsabilidad y supervisión.By accepting you will be accessing a service provided by a third-party external to https://sayumesi.com/